El diseño del edificio incluía terrazas, un dormitorio principal, un dormitorio de visita, una cocina, servicios higiénicos y una suite con jacuzzi para Villarán
09 de marzo de 2015 (La República.pe).-La gestión de la exalcaldesa Susana Villarán dejó una deuda de 250 mil soles a la Municipalidad de Lima por el diseño de un edificio inteligente y ecológico en el Centro de Lima.
Según el programa Cuarto Poder, el inmueble iba a albergar nuevas oficinas administrativas. El financiamiento iba a estar a cargo de la Caja Metropolitana. El diseño del edificio incluía terrazas, un dormitorio principal, un dormitorio de visita, una cocina, servicios higiénicos y una suite con jacuzzi para Villarán.
Para los estudios previos a la obra se contrató a la empresas Abita, Prisma Ingenieros, Enersuez, Green Energy y la Universidad Nacional de Ingeniería, por un monto de 750 mil soles. Sin embargo, dichas entidades nunca entregaron el expediente técnico ni las certificaciones. Quedó pendiente el pago de unos 250 mil soles, según documentos de la Caja Metropolitana de Lima.
Fabiola Pasapera, abogada de la entidad financiera, consideró que “es una evidente colusión de empresas para terminar dando un proyecto que solo es el resultado de una mala gestión”.
Ninguna de las empresas implicadas quiso declarar sobre los hechos. El programa dominical indicó que dentro de la gestión había desacuerdos sobre la realización del proyecto.
Villarán defiende proyecto
La exalcaldesa de Lima, Susana Villarán, respondió por la denuncia periodística que revelaba una deuda por la construcción de un edificio denominado ‘La Torre Verde’ en el Centro de Lima. A través de su cuenta de Facebook, negó que el inmueble haya sido diseñado pensando en la implementación de un jacuzzi.
Villarán de la Puente explicó que ‘La Torre Verde’ fue diseñada en convenio con arquitectos extranjeros y peruanos. Indicó que su construcción tiene como objetivo albergar a la administración central de la Municipalidad de Lima.
“Diseñado con los mayores avances en materia de eficiencia ecológica y administrativa para albergar parte de la Caja, y sobre todo, de la administración central que actualmente funciona en un edificio que es patrimonio cultural en la Plaza de Armas”, señaló.
La exautoridad edil consideró que el proyecto debe continuar, pues “se tiene que empezar a elevar los estándares de construcciones e coeficientes en nuestra ciudad y la sede de su gobierno debe ser ejemplo de esta apuesta de compromiso para prevenir y mitigar los efectos del cambio climático”.
Susana Villarán señaló que no conoce de la implementación de un jacuzzi en algún baño del edificio, y que de haberse enterado de esto, hubiera rechazado la propuesta.
“Pero sí les puedo contar que cuando llegué al despacho de la alcaldía de Lima encontré un jacuzzi en el baño. Me sorprendió desagradablemente. Añadido al mal olor de ese recinto y los problemas de descuido evidentes, reformé un baño para el despacho, austero y funcional”, expresó.